Querida compañera, querido compañero:
Hace ocho meses, sin condiciones y sin deudas ni ataduras,
comencé a recorrer España al encuentro con el corazón del PSOE, que son
los y las militantes como tú. Conversamos muchas horas y tuve ocasión de
dormir en las casas de muchos de esos compañeros. Concibo la política
como un trabajo que se hace en el terreno y de abajo hacia arriba.
Visité las agrupaciones y pude comprobar por qué el Partido
Socialista es la organización política que más ha hecho por la igualdad,
la libertad y la justicia social en nuestro país. Decenas de miles de
compañeras y compañeros trabajan cada día repartiendo comida en barrios
donde falta, protegiendo a mujeres víctimas de la violencia de género,
parando desahucios injustos, uniendo su voz a quienes claman en las
calles contra los recortes y las privatizaciones que se ceban contra los
trabajadores y trabajadoras y contra las clases medias o protestando
contra quienes quieren imponer a las mujeres ser madres contra su
voluntad para dar satisfacción a los integrismos religiosos.
También me he encontrado con el PSOE experto y sabio, la
organización con más experiencia política de España, que desde las
instituciones sabe cómo se dirige un municipio, una comunidad autónoma o
un país. El partido que ha sido el protagonista de las transformaciones
económicas, sociales y políticas más importantes de nuestra historia.
Estoy muy orgulloso de nuestro partido, pero para que renueve su
vitalidad, amplíe su círculo de militantes, simpatizantes y amigos,
recupere la credibilidad social y vuelva a ser la fuerza política
mayoritaria, tenemos que cambiar muchas cosas. Sólo si cambiamos
nosotros primero, seremos capaces de cambiar la sociedad.
Por eso debemos construir nuestra política sobre la democracia
radical y la honradez plena, sacudiéndonos los complejos para
reivindicar y renovar la defensa del Estado de Bienestar, preservar
nuestra unidad y darle sentido a esa bella palabra que es “compañero” o
“compañera”. No hay otros adversarios para nosotros que la injusticia,
la desigualdad y la insolidaridad, o quienes las amparan.
Creo que el liderazgo consiste en empujar, no en ser empujado.
Por eso quiero en primer lugar agradecer tu esfuerzo en estos momentos
en los que tú y 197.467 militantes más participamos en la elección de
nuestro nuevo secretario general. Gracias por participar y por llamar a
otras amigas y amigos a la participación. Gracias por implicarte.
Gracias, en fin, por votar: si es por mi candidatura te estaré
doblemente agradecido, pero a mí me merece todo el respeto el voto de
cualquier militante y por cualquiera de los tres candidatos: José
Antonio, Eduardo o yo mismo. Todos y todas somos necesarios, y por eso
mi compromiso es poner todo lo que esté de mi mano para que tras el
próximo día 13 el PSOE sea un partido unido y fuerte, preparado para
merecer el apoyo mayoritario de la ciudadanía.
Casi 60.000 kilómetros después de iniciar aquel viaje, hoy me
siento feliz de estar acompañado por tanta buena gente que forma tu
partido y el mío: el Partido Socialista Obrero Español. Este partido que
juntos, tú y yo, vamos a cambiar, para después cambiar España.
Con mi gratitud y mi afecto, te envío un fuerte abrazo,
Pedro Sánchez
Enlaces de interés
https://sanchezcastejon.es/mis-diez-compromisos/
https://sanchezcastejon.es/el-socialismo-que-une/
https://www.youtube.com/channel/UCIMVnw8VD5XRwStcu1klLpQ
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